Beneficios
Qué beneficios nos da la alimentación cetogénica?
1- Quemar la grasa corporal almacenada
La alimentación cetogénica es una opción fantástica para perder grasa corporal, para hacerlo necesitamos un déficit calórico y esta alimentación es sencilla de llevar y genera un excelente control del apetito, lo que la hace sostenible en el tiempo.
2- Azúcar en sangre estable
La cetosis tiene una profunda capacidad para normalizar los niveles de azúcar en la sangre, ya que nuestro metabolismo en lugar de depender del glucógeno, es preferencialmente alimentado por grasa.
3- Sueño mejorado
Si tienes problemas para dormir, como muchas personas, tal vez ya sepa que podría deberse a cambios bruscos en el azúcar en la sangre y/o inflamación sistémica. Un estilo de vida cetogénico reduce la inflamación y puede ayudar a mejorar el sueño.
¿Cómo? La inflamación puede bloquear la producción de neurotransmisores que inician el sueño, mientras que el azúcar en la sangre pueden despertarnos en el medio de la noche, hambrientos de carbohidratos.
Dicho todo esto, algunas personas realmente ven alteraciones del sueño debido a la alimentación cetogénica. Esto puede deberse a no reponer suficientes electrolitos, o simplemente puede ser que la cetosis no sea el óptimo estado para estas personas.
Dr. Stephen Phinney, MD, PhD, autor de Art and Science of Low Carbs, es de la opinión de que cualquier problema de sueño relacionado con la alimentación ceto es el resultado de una ingesta de sodio inadecuada.
4- Disminución del hambre
Como se mencionó anteriormente, la base para la pérdida de grasa es la capacidad de mantener un déficit calórico leve. ¿Te imaginas cuánto más fácil es lograrlo cuando simplemente no sientes hambre? Esta falta de hambre es una de las experiencias más profundas que las personas tienen sobre una dieta cetogénica.
5- Energía constante durante todo el día
¿Experimentas ese bajón de energía al medio día cada vez más común? La alimentación ceto te ayudará con ello, gracias a la energía que se siente debido a la disminución de la inflamación y la dependencia de la grasa versus la glucosa para la mayor parte de las necesidades de energía de nuestro cuerpo.
6- Disminución de la inflamación
Dijimos que la disminución de la inflamación es una característica loable de la cetosis, pero ¿qué significa eso?
La inflamación es un proceso biológico normal que es fundamental para las funciones metabólicas, incluida la adaptación al ejercicio. Nuestro cuerpo se nutre de unas reservas exactas de inflamación. Las dietas modernas creadas a partir de alimentos refinados, aceites de semillas, etc. elevan la inflamación tanto directamente como por dos vías específicas: aumento de la permeabilidad intestinal y elevación de los niveles de insulina. La ingesta moderada de proteína/bajo contenido de carbohidratos de la alimentación ceto ayuda con los problemas intestinales al:
* Limitar los carbohidratos fermentables, que promueven el crecimiento de bacterias patógenas.
* Reduce drásticamente la secreción de insulina, que a su vez puede ser un agente proinflamatorio si se eleva crónicamente.
7- Biogénesis mitocondrial
Las mitocondrias son los centros de producción de energía de nuestras células. A medida que envejecemos tendemos a tener menos de ellas. El ejercicio puede aumentar la cantidad y la salud de nuestras mitocondrias, pero parece que seguir una dieta cetogénica puede hacer lo mismo. Aunque no es específicamente aditivo, la combinación de alimentación ceto y ejercicio es muy similar a la magia mitocondrial.
8- Claridad mental
Muchas personas reportan una función cerebral mucho mejor mientras están en cetosis, pensando mejor, más rápido. Es probable que haya tres factores en juego aquí:
1- Sin un cambio brusco en el nivel de azúcar en la sangre de la dieta alta en carbohidratos, generalmente uno se siente más «equilibrado».
2. Las cetonas reemplazan algunas de las necesidades de energía del cerebro. No solo son más estables sino que también pueden ser un combustible superior para el cerebro.
3. La «niebla cerebral» es probable debido a la disbiosis intestinal. Ciertos carbohidratos fermentables (como los granos procesados) estimulan el crecimiento de bacterias patógenas que producen sustancias neurotóxicas. Estas sustancias se mueven desde el intestino a la corriente sanguínea, llegando al cerebro y hacen que uno se sienta fatal (letargo, niebla mental, irritación, ansiedad). Una dieta ceto (o una dieta baja en carbohidratos adecuadamente formulada) puede reducir drásticamente el número de estas bacterias patógenas, reduciendo así los casos de «niebla cerebral».
9- Lípidos sanguíneos mejorados
En general, las personas que se adaptan a la grasa en una dieta cetogénica tienden a ver una mejora notable en los lípidos en la sangre. Aumento de HDL; LDL, triglicéridos y glucosa disminuyen. Sin embargo, este NO es el caso para todos.
10- Disminución del potencial de enfermedad
Prácticamente todas nuestras enfermedades degenerativas modernas (desde algunos tipos de cáncer, hasta diabetes, SOP, desórdenes de tiroides, ECV y enfermedades neurodegenerativas) comparten problemas metabólicos relacionados con el consumo excesivo de alimentos y la insulina elevada. Por lo tanto, tiene sentido que cambiar al estilo de vida cetogénico podría ser integral para prevenir estas enfermedades, o en caso de ya tenerlas mejorar nuestra calidad de vida.
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